Esta fachada oeste, fue diseñada por Francisco de Mora en el siglo XVI, pero su construcción se resolvió un siglo después.
Guarda una gran uniformidad propia del clasicismo y cuenta con cuatro niveles en altura, con un total de 24 huecos para ventanas así como 16 ventanos.
Recorren toda esta fachada, de sillares bastante homogéneos, 7 pilastras planas de poco realce que se entrecruzan con tres molduras planas.
Las pilastras parten desde la base del edificio y terminan en la cornisa del mismo, mientras que las 4 molduras, de similar composición, recorren horizontalmente la fachada entre los dos machones existentes en los vértices de este paramento, que como contrafuertes lo refuerzan.
En el primer nivel tenemos 8 grandes ventanas, a nivel casi del suelo, protegidas con rejas y con sencilla decoración moldurada.
Sobre ese primer nivel aparece otro creado entre su moldura superior y otra segunda, en la que tenemos un total de 16 ventanos.
En el tercer nivel 8 ventanas-puertas con balcón, rodeadas de moldura similar a la de la planta baja, y en el cuarto otras 8 ventanas, éstas ya sin molduras y con balcón de menor anchura.
Queda rematada la fachada con cornisa, y sobre el tejado aparecen 7 pilares con decoración de bolas, como remate de cada una de las pilastras, y en las esquinas y como remate a los contrafuertes 2 pináculos.