Iglesia
Percibimos en esta imagen, vista desde el patio del monasterio, la nave de la iglesia sobre la panda norte del claustro, con parte de una de las dos torres que posee a los pies de ella, a la izquierda, mientras que a la derecha vemos el transepto y cimborrio sobre crucero con su balaustrada y adorno de bolas, sobre el que se alza el chapitel cubierto de pizarra, con cuatro ventanas abuhardilladas en su parte inferior.
También podemos comprobar que la nave cuenta con cuatro ventanas y tres contrafuertes de los que salen otros tres arbotantes que terminan sobre el tejado inferior lateral a través de un pínaculo de bolas.
En cuanto al transepto constatamos que posee ventana en su brazo y se remata con frontón triangular calado, ya que su tímpano se encuentra horadado por un óculo u ojo de buey.
Aunque la primera fase de la iglesia fue levantada por Gaspar de Vega, en 1577, seguido de Pedro de Tolosa, asi como por otros colaboradores como Diego de Alcántara, Bartolomé Ruiz, Pedro Lizargárate, etc., el plano definitivo del templo le corresponde al arquitecto renacentista conquense Francisco de Mora, discípulo de Juan de Herrera, quien dirigió las obras desde 1587 a 1609, al más puro estilo herreriano, considerándose el año 1602 como la fecha de terminación de la misma.