Capilla de la Anunciación
Junto a la capilla del Bautismo, pero ya abierta en el muro norte de la nave del evangelio, se sitúa la Capilla de la Anunciación, fundada en el año 1531 por Juan de León, canónigo de la Colegiata y hermano del abuelo de Fray Luis de León.
Quizá fuese el arquitecto Juan de Alviz el que diseñara las trazas arquitectónicas protorrenacentistas de esta capilla, donde se funden las formas góticas con las renacentistas.
Desde el exterior de ella no puede apreciarse su arco de entrada, debido a que lo dificulta la reja que la cierra, algo que si puede observarse desde el interior de la misma.
Precisamente esta reja es una de las más artísticas que hay en territorio conquense, que se detalla a continuación junto con su Retablo Mayor, así como los dos arcosolios que acogen un sepulcro y otro retablo.
Respecto a esta magnífica reja y a otras que cierran otras capillas de esta Colegiata hay que tener en cuenta que a principios del siglo XVI se desarrolló en Cuenca uno de los periodos más esplendorosos de su historia artística, despuntando entre otros artes el de la rejería, ya que por una parte disponía en su territorio de la materia prima, el hierro, que se traía desde Tragacete, al norte de la provincia, y por otra se daba la circunstancia de que Cuenca contaba en esos momentos con suficientes medios económicos con los que poder cerrar con rejas las capillas de su Catedral, llegándose a crear por ello una afamada escuela conquense que mantuvo la tradición del trabajo del hierro.
Será en varias de las capillas de la Catedral de Cuenca y en algunas de las capillas de esta Colegiata de Belmonte donde encontraremos la mayoría de las rejas que las cierran y que se elaboraron en esos talleres por maestros rejeros tan conocidos como Juan Francés, Esteban Limosín o Hernando de Arenas, que de todos ellos tenemos obras en esta Colegiata de Belmonte.