El arte en Cuenca

Retablo de la Virgen de las Nieves

Este retablo sustituye a otro más antiguo que se había realizado con motivo de una peste sucedida en la ciudad en el año 1492 y curada por la intercesión de esta advocación mariana.

De estilo barroco, fue ejecutado en el año 1717 por Francisco Pérez y Fernando Martínez.

Sobre el altar se eleva este retablo formado por una ancha predela, un cuerpo principal con decoradas columnas salomónicas y una hornacina con la imagen de la titular, así como un montante como remate.

Capilla de San Bartolomé

Junto al retablo de la Virgen de las Nieves se encuentra la Capilla gótica de San Bartolomé, fundada por el canónigo Ruy Gómez de Anaya en la segunda mitad del siglo XV, que fue afectada por el hundimiento de la torre catedralicia en el año 1902.

Sobre el arco escarzano de la portada de esta Capilla hay una ménsula sostenida por un ángel que sujeta un escudo entre sus manos que soporta una talla de madera policromada, posiblemente del titular de la misma.

La Capilla posee una bóveda de crucería apoyada en ménsulas, y al fondo de la misma, a la derecha, conserva el Retablo de San Bartolomé de mediados del s. XVI, formado en su cuerpo principal por cuatro columnas platerescas que sostienen el entablamento superior y otras dos más pequeñas bajo el arco de medio punto de la hornacina que cobija la imagen del Santo.

En la calle de la derecha, una tabla representa a S. Fco. de Asís, y debajo de ella un medallón con la Adoración de los pastores, mientras en la de la izquierda figura la aparición de Jesucristo a S. Gregorio, con el medallón inferior de la Adoración de los Reyes Magos.

En el frontón del retablo figura el Padre Eterno sosteniendo la bola del mundo, y en la predela figuras con escenas de la Pasión del Señor.

Se aprecia en la imagen, a la derecha, en el muro de entrada a la Capilla unas pequeñas esculturas representando La Piedad.

Capilla de San Juan Bautista

Portada de entrada a esta Capilla de San Juan Bautista que acoge en su interior el retablo de San Mateo y San Lorenzo.

El Retablo de San Mateo y San Lorenzo debió ejecutarse hacia 1552 con la participación en su elaboración de Esteban Jamete como entallador del mismo y Martín Gómez el Viejo en cuanto a la pintura.

Entre dos columnas abalaustradas rematadas por capiteles jónicos aparece la tabla en la que se representa a los titulares de este altar sobre un fondo de oro, con la figura de San Mateo con la pluma en su mano derecha mientras un ángel le presenta el tintero con su mano izquierda y sostiene con sus alas el libro en el que San Mateo escribe su Evangelio.

San Lorenzo sujeta una gran parrilla con su mano derecha y sostiene la palma del martirio con la izquierda.

Sepulcro de Gómez Vallo

Se trata de un sepulcro del siglo XV, con el bulto yacente del Arcediano de la Catedral Gómez del Vallo

Detalle del Sepulcro del Canónigo Gómez del Vallo.