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Torrejoncillo del Rey: Patrimonio artístico

 

 

TORREJONCILLO DEL REY: PATRIMONIO ARTÍSTICO

 

 

El patrimonio artístico de esta población, que se muestra en esta página, es el siguiente:

*Ermita de la Soledad / *Ermita de Urbanos / *Portada y Pila Bautismal de su primitiva Iglesia / *Convento de Franciscanos / *Mina de “lapis specularis” de la Mora Encantada / *Ayuntamiento / *Otras Fachadas / *Ruinas Ermita de la Soledad.

 

ERMITA DE LA SOLEDAD

 

Se trata de una ermita del siglo XVII construida en mampostería con sillares en las esquinas, zócalo, cornisa y enmarcado de puerta y ventanas.

Salvo la fachada principal, y los sillares esquineros, el resto de sus muros se encuentran enfoscados y encalados.

Rodean a la puerta adintelada de entrada a la ermita tres ventanos: uno sobre la misma puerta y los otros dos a los lados.

De todos estos vanos tan solo la puerta de entrada muestra en el dintel, así como en sus jambas, una sencilla decoración moldurada.

Imágenes del interior de la ermita, vistas desde el coro y desde la cabecera.

 

El interior de la ermita consta de una sola nave que se divide en tres tramos que se cubren con bóvedas de lunetos.

Entre cada uno de los contrafuertes interiores se forman sendas capillas laterales poco profundas que se cubren con bóvedas de cañón.

En el altar mayor de la ermita se encuentra este dorado Retablo de estilo barroco, obra del primer cuarto del siglo XVIII que presenta una decoración de rocalla.

El retablo se apoya sobre un sotabanco y está formado por predela, un único cuerpo y ático de perfil semicircular.

El cuerpo se divide en tres partes o calles formadas por cuatro columnas, las centrales con capiteles compuestos.

En la parte central y superior del ático se sitúa una talla policromada con la imagen de Cristo crucificado.

La cabecera se cubre mediante bóveda de media naranja sobre pechinas.

Esta bóveda presenta en su intradós una decoración formada por dos nervaduras circulares concéntricas y otras ocho perpendiculares a ellas en cuyas intersecciones figuran medallones en los que aparecen en relieve la imagen de un busto angelado.

Esta decoración de angelotes se representa igualmente en la clave de la bóveda y en el interior de las pechinas.

El camarín de la virgen muestra en su bóveda de media naranja otro tipo de motivo ornamental en cuya clave se representa un florón.

 

ERMITA DE URBANOS

 

A unos cinco kilómetros de Torrejoncillo se ubica esta ermita de Nuestra Señora de la Piedad de Urbanos, patrona de la población.

En el entorno donde se emplaza la ermita se descubrieron los restos de un yacimiento romano en el que se hallaron diversos testimonios de aquella época.

La ermita actual es una edificación construida en el año 1930, con una sola nave.

Cada lateral de la nave cuenta al exterior con una galería porticada de cinco arcos de medio punto sobre pilares rectangulares.

La fachada de entrada al templo cuenta también con un porche de estructura similar al de las galerías laterales, con arco de medio punto en cada uno de sus lados. En el caso del existente frente a la puerta de entrada, cada uno de sus lados cuenta con otro vano más estrecho y arco peraltado.

La portada de entrada a la ermita, realizada en sillería, cuenta en la clave de su arco de medio punto con una cruz patada inserta elaborada en piedra.

Por encima del porche se abre en el hastial de la nave un óculo.

A los pies del templo se eleva una espadaña rematada por frontón triangular y pináculo de bola con un solo vano para campanil, bajo arco de medio punto.

La nave de la ermita se conforma mediante arcos que apoyan sobre machones, entre los cuales se disponen en su zona elevada cinco ventanas que ofrecen una buena iluminación interior.

Se cubre la nave con techo plano de madera soportado por vigas del mismo material que descansan sobre los arcos reseñados.

Arco triunfal que separa la nave del presbiterio con el retablo emplazado en el muro plano del ábside.

El Retablo de esta ermita, del siglo XVIII y sin dorar, está compuesto con los restos del existente en la primitiva iglesia parroquial de la población.

Se organiza este retablo, realizado en madera tallada y con ornamentación de rocalla, con un alto basamento sobre el que se apoyan cuatro grandes columnas de fuste estriado y capiteles de orden compuesto.

Las columnas separan las tres calles con que cuenta el único cuerpo del retablo, con mayor anchura la central en la que se sitúa una hornacina.

Sobre las columnas centrales se asientan tallas de angelotes.

La parte superior del retablo o ático se cierra con perfil semicircular, y en su centro aparece un relieve policromado.

Ermita de Urbanos

 

PORTADA DE SU PRIMITIVA IGLESIA

Imagen correspondiente a la denominada Puerta de los Abriles.

 

Esta abocinada portada de finales del siglo XV, o de comienzos del XVI, corresponde al resto que queda en pie de la antigua iglesia parroquial de la población, que fue derrumbada en los años sesenta del pasado siglo.

Dicha primitiva iglesia contaba con tres naves separadas por grandes columnas cilíndricas, al estilo denominado “Priorato de Uclés”.

La portada muestra una impronta gótica, en la que las jambas presentan unas hornacinas decoradas sobre las cuales figuran unos arcos ojivales y otro inferior de tipo carpanel.

Una imposta moldurada y decorada con un perlario de bolas abulenses, que nos remite al gótico isabelino, marca la línea divisoria entre la parte inferior de la portada y la superior de los arcos.

En estas imágenes de las dos jambas de la portada se aprecia en la parte superior la imposta con decoración de bolas, bajo la cual figuran las hornacinas.

Estas hornacinas, o cavidades en las que se colocan estatuas, se rematan en su parte superior con una bovedilla que al exterior conserva parte de los doseletes que decoraban estos huecos.

Las cuatro hornacinas superiores conservan las peanas o repisas de lampetas, en forma de cono invertido de superficie escalonada, sobre el que se solían colocar tallas de estatuas de santos, apóstoles, evangelistas u otras figuras importantes de la iglesia católica.

Las repisas molduradas para apoyo de las estatuas también presentan como motivo decorativo las bolas abulenses.

La parte superior de la portada se compone de un gran arco ojival en sillería tras el cual se articulan un par de arquivoltas aboceladas con molduras cóncavas, y un tímpano de sillares sobre arco carpanel con decoración de bolas en su extradós, con un escudo en el centro de este tímpano existente entre ambos arcos.

Escudo episcopal dispuesto en el tímpano, con estrellas de ocho puntas.

 

PILA BAUTISMAL DE LA PRIMITIVA IGLESIA

 

La pila bautismal de la primitiva iglesia se ubica en el interior de la actual parroquial de la Asunción de Nuestra Señora.

Está compuesta por una basa o soporte poligonal que presenta una forma cónica invertida y una copa o vaso de planta octogonal que ofrece exteriormente variados motivos decorativos.

Respecto a esta forma geométrica octogonal, como heredera de los baptisterios y piscinas bautismales paleocristianas, hay que indicar que el número ocho pretende aludir simbólicamente a la regeneración, salvación y resurrección, mensajes relacionados con el sacramento del bautismo.

 

Detalle de algunos de los paneles o cartelas exteriores de la copa de la pila bautismal en los que se representan motivos circulares, figuras de animales y castillos.

 

CONVENTO FRANCISCANO

 

Los restos que se conservan del Convento de los Franciscanos Descalzos corresponden a la ruinas de la Ermita de Nuestra Señora de la Paz, que era la iglesia de este conjunto conventual que tenía la orden franciscana en la población.

Fue fundado en el año 1602 por el místico castellano fray Juan de los Ángeles, escritor religioso de la España de Felipe II.

Construida en mampostería de piedra irregular y con sillería en las esquinas. así como en el enmarcado de ventanas y portada, posee una sola nave en la que se encontraban los panteones de la familia Balsalobre Jaramillo.

 

MINA ROMANA DE LAPIS SPECULARIS “LA MORA ENCANTADA”

 

Esta mina, que puede ser visitada interiormente, se ubica como a un kilómetro al noroeste de la población, en una pequeña elevación conocida como el “Cerro de la Mora Encantada”.

El vecino del pueblo, Pedro Morales Cuenca, descubrió en dicho cerro la mina en el año 1955.

Esta mina de “Lapis specularis” o espejuelo de “La Mora Encantada” formaba parte de un complejo minero mayor, de al menos otras diez minas más, situadas en dos zonas, una junto a esta de la Mora Encantada, y otra cercana al cerro del Telégrafo o de San Bartolomé.

Dicho complejo minero se articulaba mediante una calzada secundaria que saliendo del pueblo y pasando por la de la Mora y en dirección a Valparaíso de Abajo (cruzando el rio Cigüela por un posible puente romano del que solo quedan sus arranques) se accedía al del Telégrafo y posteriormente al de La Quebrada (o Cueva del Espejuelo) camino de Valparaíso de Abajo.

La mina de la Mora, con más de un kilómetro de galerías, tiene una profundidad en torno a los -40 metros de cota y se estructura en tres zonas: sala principal, galerías del este y el tercer nivel; la última zona, la de mayor profundidad, puede estar a veces inundada.

Cuenta con dos pozos de extracción (uno de ellos de 25 metros) y con una entrada en pendiente con escalones tallados a pico como acceso o para extracción del mineral.

El complejo minero de Torrejoncillo, que se sitúa en ambas márgenes del río Cigüela, se vertebraba a través de la calzada que discurría paralela al río conectando con el paraje de Villas Viejas (Huete), donde enlazaba con la calzada principal que se dirigía hacia el puerto de Cartagena.

Desde la población, en el actual “camino de la Madre de Dios”, se llega a la Ermita de Urbanos, yacimiento romano posible “mansio”, villa o santuario en un importante cruce de calzadas (entre Urbanos y Villas Viejas y entre Urbanos y Segóbriga). Cerca se encuentra también el lugar romano de Santa Brígida.

Continuaba el camino por el yacimiento de Quintanares (otra villa) hasta la Ermita de San Miguel (Fuente del Pez), con restos romanos donde cruzaría al otro margen del rio y enlazaría con las minas de “lapis” de Palomares del Campo y de Villas Viejas, llegando a los Fosos de Bayona (antigua Contrebia Cárbica) para conectar con la vía a Carthago Nova.

Entrada en pendiente con escalones para el acceso a la mina y uno de los pozos de extracción del mineral.

Detalle de la mina y ejemplar de una pieza de espejuelo trabajada, expuesta a la entrada de la visita a la mina.

Imágenes del espejuelo en el interior de la mina.

El “lapis specularis” o espejuelo es un tipo de piedra de yeso traslúcido que se explotaba en época romana para la fabricación, a modo de cristal, de ventanas así como para su aplicación en la construcción y como para su utilización como polvo para las arenas de los circos romanos.

Igualmente se utilizaba entre otros como material suntuario y decorativo tras un procesado con el que se obtenía estuco o escayola para molduras o adornos artísticos.

 

AYUNTAMIENTO

 

Es un edificio cuyo origen se remonta al siglo XVI, aunque sufrió posteriores modificaciones.

En su planta baja puede apreciarse su arquería renacentista labrada en sillería, que apoya sobre los capiteles de unos machones o pilares en cuyas enjutas figuran unos relieves circulares o escudos sin labra alguna.

 

TRES FACHADAS DEL SIGLO XVIII

 

 

 

RUINAS ERMITA DE LA ESPERANZA

 

En las afueras de la población se encuentran las ruinas de la neoclásica Ermita de la Esperanza, excavada en la ladera de un terreno.

En el muro de su ábside se sitúa una hornacina avenerada con arco de medio punto.

Se cubre la cabecera mediante bóveda, de media naranja sobre pechinas, ornamentada en su clave con un florón.

Vista de la población desde el interior de la ermita.

 

 

 

 

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Latitud: 40° 0' 31.0824" N
Longitud: 2° 34' 24.6216" W

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